Tortuga sulcata

Tortuga sulcata

Las tortugas Sulcata crecen rápidamente y son de las más grandes del orbe. Ello, y su temperamento agresivo y gracioso, las convierte en una especie atractiva de estudiar y acoger como mascota.

Hábitat natural

Las sulcatas africanas, solo superadas en tamaño por las tortugas de las islas Galápagos y Seychelles, habitan en regiones cálidas y áridas de la zona subsahariana, puesto que no se les da bien el habitar en condiciones húmedas, mojadas o frías.

En la naturaleza los ejemplares de esta especie van bajo tierra durante meses para contrarrestar los períodos de calor insoportable y la sequía. Sus madrigueras son menos calientes y les proporcionan la humedad suficiente para evitar su deshidratación durante este largo período.

Esta práctica de las sulcatas se conoce como estivación y es importante no confundirla con la hibernación, que es el sueño invernal que realizan muchos animales, las tortugas entre ellos, y en el caso de la que nos ocupa se caracteriza por una menor latencia vital, a partir de una disminución natural de la presión arterial y la tasa de respiración.

Características físicas

El caparazón (concha superior) de las tortugas sulcatas es muy amarillo en el centro de cada escudo (la placa externa o la escala de la cáscara). Cada escudo a su vez se caracteriza por exhibir anillos de crecimiento marrones. El plastrón (carcasa inferior) puede ser marrón claro o amarillo, sin marcas de otro color.

La piel de este animal es muy gruesa y las patas están cubiertas de proyecciones vertebrales. Los espolones prominentes en las patas traseras no tienen ninguna función observable.

Los ejemplares de esta especie tienen un ritmo de crecimiento muy rápido y algunos logran alcanzar la longitud de 85 cm en su caparazón, mientras que algunos machos logran alcanzar un peso de hasta 100 kg.

Temperamento de la tortuga sulcata

Temperamento

En la cría de esta especie se debe evitar juntar más de un macho en un mismo recinto.

Tanto los machos como las hembras de tortuga sulfata pueden ser agresivos. Cuando los machos alcanzan la madurez sexual, aproximadamente cuando tienen 35,56 centímetros de longitud de caparazón, embisten a otros machos y tratan de voltearlos. Por lo tanto albergar a más de un ejemplar de este sexo puede ser peligroso para el éxito y armonía de la cría.

Las tortugas sulcatas además son activas y les gusta cavar, escalar y vagar, a menudo en busca de alimento. Son animales muy fuertes y se conoce que son capaces de derribar vallas e incluso paredes. Se sienten muy atraídos por los artículos con colores brillantes y ante la presencia de estos tratan de moverse en su dirección, con independencia de lo que se interponga en su camino.

Manipulación

Las sulcatas africanas pueden ser manipuladas con cuidado cuando son pequeñas. A menudo se ponen demasiado grandes y pesadas como para ser cargadas, por lo que debe evitarse intentar hacerlo con ejemplares jóvenes o adultos.

Si el criador necesitase mover a su mascota o cría, puede emplear una flor comestible de color brillante o una pieza de fruta como señuelo; con mucha probabilidad, la tortuga se moverá en la dirección deseada por lo explicado anteriormente.

Vivienda

Las sulcatas africanas se pueden mantener en viveros o acuarios secos.

Debido a su tamaño, los ejemplares jóvenes y adultos son los más adecuados para residir al aire libre. Una "casa" lo suficientemente grande para que la tortuga se mueva en su interior puede ser, por ejemplo, una casa cobertizo o una espaciosa para perro. Esto les debe ser proveído para protegerlas de las inclemencias meteorológicas y el frío.

Geochelone sulcata

Estos animales podrían necesitar en su recinto una fuente de calor, la que se les debe proporcionar en dependencia de la temperatura ambiental. Es extremadamente importante que la casa al aire libre sea en una zona seca.

La fuente de calor podría ser una lámpara incandescente, la que ayuda a la tortuga a producir vitamina D. En recintos exteriores al aire libre, las sulcatas deben tener áreas en las que reciban la luz directa del sol y zonas de sombra para la refrigeración. Si se mantiene en el interior, se les puede proveer 14 horas de luz del día, simulada por un espectro de luz ultravioleta (UVB) y una blanca, incandescente.

La luz UVB, como la solar, es necesaria para que las tortugas produzcan la vitamina D, que las ayuda en la sintetización de calcio, indispensable para el crecimiento sana y fortalecimiento de los escudos del caparazón.

Sustrato: el sustrato de una vivienda para tortugas, ya sea en interior o al aire libre, puede estar constituido por una mezcla de tierra y arena para que el animal cave, con zonas bien definidas de sol y sombra.

Temperatura: La temperatura diurna del recinto durante la mayor parte del año debe oscilar desde 24 hasta 38 grados Celsius. Durante la noche, la temperatura dentro de la casa no debe caer por debajo de los 21.

El calor debe ser proporcionado si la tortuga se mantiene al aire libre durante períodos de tiempo más fresco. Si el clima frío es más frecuente, la apertura de la casa de la tortuga debe estar cubierta con una cortina.

Si es alojada en el interior, las temperaturas deben estar dentro de la misma gama y un área de calentamiento a 32 grados Celsius debe ser proporcionada durante el día.

Humedad: Aunque las tortugas Sulcata viven en el desierto, su entorno real puede ser más húmedo, ya que pasan gran parte de su tiempo en cuevas o madrigueras. La investigación ha demostrado que las tortugas que viven mayormente en condiciones secas son más propensas a desarrollar una anormalidad en los escudos llamada "pirámide". Esto se manifiesta en una protuberancia en forma anormal de los escudos y se ha constatado que las tortugas criadas en ambientes con un por ciento de humedad entre 45 y 99, tienen más probabilidad de experimentar un crecimiento anormal de su cáscara que aquellas criados en condiciones más secas.

Caracteristicas de la tortuga sulcata

Paisajismo y mobiliario: A las sulcatas les gusta trepar. Por ello no se les debe dar la oportunidad de subirse a objetos o cosas demasiado elevadas. Pueden caer y hacerse daño, además de salir de su recinto y provocar desastres en el patio, interior de la casa y quién sabe donde más.

Debido a que son tan fuertes, el patio en el que se mantienen estas tortugas debe ser cercado con materiales muy fuertes. Las sulcatas han sido capaces de mover paredes, incluso soportadas en concreto, para llegar a algo que les interesa.

La cerca también debe ser construida de modo que se prevenga una posible excavación del animal para franquearla por debajo.

En cuanto a los objetos que se les deja cerca, hay que recalcar que estas tortugas serán atraídas por cualquier cosa de color brillante e intentarán comerla, y por ello lo mejor es evitar colocar en su recinto o cercanías cualquier cosa lo suficientemente pequeña como para ser ingerida por el animal. En esta categoría podemos incluir juguetes, latas, y objetos de vidrio y plástico.

Limpieza: Debido a la voracidad de la especie, las sulcatas producen una gran cantidad de residuos. Comen regularmente sus propias heces y las de otros animales, por lo que muestras fecales regularmente deben ser revisadas por un veterinario que descarte la presencia de bacterias, protozoarios y lombrices.

Para mantener condiciones higiénicas adecuadas, es necesaria la limpieza diaria de la yarda en la que habitan la o las tortugas sulcatas.

Agua: Un estanque de agua poco profundo debe estar disponible en todo momento. El repositorio del vital líquido debe tener partes poco profundas para que la tortuga pueda entrar en él y salir con facilidad si así lo quisiese, ya que no puede nadar y si el estanque fuese profundo, pues la tortuga podría ahogarse.

Dieta de la tortuga sulcata

Dieta

El heno y la hierba son excelentes alimentos para una tortuga sulcata criada en cautividad. Esta especie es de apetito voraz y los alimentos se le deben dispensar en cantidades considerables. Una dieta adecuada es fundamental para la salud y en el caso de la sulfata esta debe ser alta en fibra y calcio, y baja en grasas y proteínas.

En la naturaleza, las sulcatas pastan de manera similar a las vacas o las ovejas, y la vegetación del desierto a menudo es gruesa y de mala calidad nutricional. Con una dieta de mayor calidad nutricional, la tortuga puede experimentar malformaciones de la cáscara, una tasa de crecimiento demasiado rápida, diarrea y otros problemas.

El heno de hierba o heno de escamas es lo más semejante a la vegetación natural de la especie. Pueden ser comprados en el mercado, al igual que la semilla de la hierba de pasto, para su siembra y posterior consumo por parte de la tortuga.

Las verduras de hoja verde también se deben ofrecer en la alimentación de una tortuga sulcata, pero deben constituir menos del 25 por ciento de la dieta. Alimentos apropiados de esta clase son las hojas de nabo, endibia, escarola, dientes de león, y pequeñas cantidades de lechuga romana. Espinaca, hojas de remolacha, hojas de la zanahoria, la col rizada, brócoli, y especialmente el ruibarbo, contienen altas cantidades de oxalatos, que se unen calcio, por lo que estos deben ser ofrecidos en cantidades limitadas.

La col, la coliflor, el brócoli, la col rizada y hojas de mostaza contienen además sustancias llamadas "bociógenos", que pueden afectar la función tiroidea, aunque este efecto rara vez se ve menos porque para ello se deben haber consumido grandes cantidades de estos alimentos.

En cuanto a las frutas, a la tortuga se le pueden dar pequeñas cantidades de fresas, plátanos, melón y manzanas. Un suplemento de calcio debe ser dado con regularidad como complemento de la dieta, al igual que un suplemento de vitamina/mineral.

Por último, las tortugas son herbívoras, por lo que los alimentos a base de carne no deben ser proveídos.

Reproducción

En la naturaleza, la reproducción se produce con mayor frecuencia después de la temporada de lluvias (septiembre a noviembre), pero puede ocurrir en cualquier momento a partir de junio y hasta el mes de marzo.

Los machos suelen llegar a ser muy vocales durante el apareamiento. Como los huevos se desarrollan dentro de la hembra, su apetito disminuirá. Ella se torna inquieta mientras comienza a vagar en busca de un sitio adecuado para anidar.

Reproducción de la tortuga sulcata

Así, puede excavar varios nidos antes de seleccionar uno, cuyas dimensiones finales estarán cercanas a los 61 centímetros de diámetro y varias pulgadas de profundidad. En él la hembra anidadora deposita entre 15 y 30 huevos, e incluso más.

Las tortugas que habitan en climas más cálidos, y se mantienen al aire libre durante la mayor parte del año, pueden tener dos embragues. Después de que todos los huevos son puestos, la hembra llena el nido y cubre a sus futuras crías con la tierra y la arena que fue excavada previamente.

Los huevos se incuban durante unos ocho meses y las crías se salen del nido con una longitud del caparazón cercana a los cinco centímetros. Son agresivas y activas, embistiendo cualquier cosa que se conserve en su recinto.

Las crías pueden mantenerse bajo techo en un acuario seco o vivero. El sustrato debe ser comestible, tal como heno de alfalfa, que no es apropiado para los adultos. El recinto debe mantenerse a temperaturas cercanas o superiores a los 22 grados Celsius, con un área de calentamiento entre los 35 y los 43 grados Celsius. Asimismo, de 10 a 12 horas al día de luz UVB es necesaria para el crecimiento saludable.

Las crías pueden no empezar a comer de inmediato. Los alimentos deben proporcionárseles todos los días hasta que comiencen a alimentarse. Luego se les ofrecen cada dos días después de que empiecen a comer.

Los peques tienden a preferir los alimentos verdes oscuros como la alfalfa, la col rizada, diente de león, col, y otras hierbas. Las multivitaminas y los suplementos de calcio se pueden añadir a su comida.

A las crías mantenidas al aire libre se les deben proporcionar los mismos requisitos de vivienda que a los adultos.

Las sulcatas crecen rápidamente y alcanzan su tamaño adulto dentro de 15 y 20 años.

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